dimarts, 23 d’abril del 2013

La primera vez que la vi

Pocas semanas después del positivo nos llevamos el primer susto: al ir al baño apareció la sangre, la temida sangre. No recuerdo mucho más... Creo que estaba sola en casa y llamé a mi madre para que me acompañara al hospital. A partir de ahí está todo borroso, imagino que mi mente estaba centrada en pedirle a mi bebé que se quedara.

La próxima imagen que tengo es la de estar tumbada en el potro, que a l@s ginecólog@s les irá muy bien para explorar, pero que es incómodo de co...nes (intento evitar los tacos en el lugarcito de mis niñas) y con el odiado ecógrafo transvaginal en mi interior. 

Me da por imaginar qué pensaría si no lo hubiera visto en mi vida, si no conociera esos aparatejos. ¡Ni que me paguen me sentaría yo allí y me dejaría introducir semejante falo! No me digáis que no tienen toda la pinta de instrumentos de tortura.

Recuerdo que el ginecólogo me pareció muy gracioso. Realmente no lo recuerdo bien, pero en mi mente es la suma entre Charles Chaplin y Steve Urkel, con acento latino. Seguramente es muy diferente en la realidad, pero esa es la imagen que se guardó en mi memoria, distorsionada por los nervios, la angustia, las hormonas, la falta de atención y de interés por mi parte en su aspecto.

Empieza a explorarme y llama a la enfermera: Mira, ¡esto es increíble!. Me asusto más. ¿Qué especie de alien habrá encontrado el doctor en mi vientre? Al ver mi cara gira la pantalla hacia mí. Aquí se ven dos latidos, me dice. ¡Queeeeeeeeé! No sé si reírme o llorar de emoción. Esto no me lo esperaba.

Me explica que es muy pronto para saberlo, que estaré de unas 5-6 semanas. Se ve claramente un solo saco gestacional y, al parecer, dos polos embrionarios de 0.37 y 0.39 mm, respectivamente (he tenido que mirar el informe para recordar las medidas). Según me explicó ese "otro latido" podría ser mío (algún vaso sanguíneo de por ahí). Al parecer todo estaba bien, excepto por un pequeño hematoma que era el que provocaba el sangrado (y que se reabsorbió poco tiempo después).

Soy una inculta total en estos temas, pero siempre me ha quedado la duda de si ese segundo latido sería otra pequeña vida, de la que nunca más se supo... 

Os dejo la primera "foto oficial" de Júlia: la primera vez que la vi. Esa eco que me mostró que ese embarazo era real, que una vida (o dos) crecía en mi vientre.

02/06/11

Dos semanas más tarde volvimos, por otro sangrado. Pregunté: ¿Cuántos son? La ginecóloga, no tan graciosa como su compañero y mucho menos efusiva, me dijo con cara extrañada y algo seca que era uno. Me miró con cara de ¿cuántos esperabas? Tuve que explicarle la eco anterior (creo que tomó a su colega por tonto).

No sé si sus palabras nos tranquilizaron o nos desilusionaron. Nos habíamos hecho a la idea de que serían dos... Aunque lo único importante es que estaba bien. Mi precioso embrión de prácticamente 9 semanas había crecido. Ya medía 20.8mm y latía fuerte. ¡Qué ilusión poder escucharlo!

Ya colgué esta eco aquí, pero vuelvo a hacerlo. Es mi gran tesoro (no guardé nada más de mi bella florecita). Y no me canso de mirarla.

19/06/11

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